Desde su nacimiento se adoptaron medidas punitivas en caso de incumplirlo. Dentro de las que, los agentes de tránsito realizan un procedimiento en el que incluso retienen el vehículo infractor.
Si este es el caso, el auto puede ser trasladado a un Centro de Retención Vehicular (CRV). Habitualmente, los usuarios esperan el arribo de una grúa, que remolcará su carro. Sin embargo, tenga en cuenta que tiene una alternativa más cómoda y económica: conducir por su cuenta hasta el CRV indicado por la autoridad. Al menos, podrá ahorrarse un poco de dinero, que seguro le servirá para el pago de la multa, castigo que es inevitable.
Otro aspecto importante es que, según lo dispuesto en el artículo 2625 del Código Municipal para el Distrito Metropolitano de Quito, en caso de que haya irrespetado el plan de restricción y regulación de circulación vehicular, si usted paga la multa respectiva el mismo día, podrá retirar su automóvil fuera del horario de prohibición.
Las sanciones por no acatar el Pico y Placa son: primera vez 15 % de un Salario Básico Unificado (SBU), segunda vez 25 % y tercera vez será el 50 %. Pero lo más importante, es que, en todos estos casos los agentes están facultados para retener el automotor.
Lo mejor que puede hacer es tomar todas las precauciones para evitar ser sancionado. No olvide que puede parquear su carro, mientras esté vigente el Pico y Placa, en los estacionamientos de borde. Se ubican en: Cuscungo (Autopista General Rumiñahui), Condado (Calle Camilo Guachamín y La Esperanza), y Zámbiza (Av. De Las Palmeras y Av. El Inca). El servicio es completamente gratuito y atienden desde las 04:00 hasta las 22:00.
En lo que va de este año, 11.440 vehículos han sido retenidos por no cumplir con la disposición. Pese a que cueste un poco dejar el auto en casa, recuerde que el objetivo es reducir, en algo, el calamitoso tráfico que afronta Quito en las horas pico y por ende que los tiempos de traslado se reduzcan.
